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El propio Ministerio de Sanidad reconoce en un informe que la vacuna de Pfizer-BioNTech, la que se está inoculando en residencias de ancianos, tiene efectos secundarios (aunque no son graves), especialmente tras la segunda dosis.
La segunda dosis se aplica 21 días después de la primera. Entre los efectos secundarios reconocidos y más habituales son las reacciones alérgicas locales, la fatiga y las cefaleas. Estos efectos adversos aparecen con menor frecuencia entre mayores de 55 años.
Así figura en el documento que recoge la última Estrategia de vacunación frente a COVID-19 en España, un informe técnico elaborado por el Grupo de Trabajo Técnico de Vacunación COVID-19, de la Ponencia de Programa y Registro de Vacunaciones.
En el anexo de ese documento, de 13 páginas, se incluye una breve descripción del tipo de efectos secundarios que se han asociado hasta el momento con la vacuna de Pfizer, la única que de momento cuenta con la autorización para su uso por la Agencia Europea del Medicamento.
Sanidad asegura además que los efectos son más frecuentes 'tras la segunda dosis'. Es decir, no en la primera inyección -la que se llevó a cabo el pasado domingo-, sino en la dosis que debe recibir cada paciente pasados 21 días de la primera.
Datos acerca de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech
En los ensayos clínicos, los síntomas de reactogenicidad (efectos secundarios que aparecen dentro de los 7 días después de vacunarse) eran comunes, pero principalmente fueron de leves a moderados.
Los efectos secundarios (fueron reacciones locales (84.1%), fatiga (62.9%), cefalea (55.1%), mialgias (38.3%), escalofríos (31.9%), artralgias (23.6%) y fiebre (14.2%). Es decir, cansancio, dolores de cabeza, escalofríos, dolores musculares y fiebre o febrícula, los principales síntomas asociados a un proceso gripal común. Estos efectos fueron más comunes después de recibir la segunda dosis de la vacuna.
Sin embargo, una pequeña cantidad de personas tuvo efectos secundarios graves, definidos como los efectos secundarios que afectan la capacidad de una persona para realizar sus actividades diarias.
Aunque fueron, en principio, pocas las personas de los ensayos clínicos que fueron llevadas al hospital e incluso fallecieron, los datos sugieren que las personas que recibieron la vacuna de Pfizer-BioNTech eran menos propensas a tener estos resultados más graves en comparación con las personas que recibieron la solución salina de placebo.
Los CDC seguirán ofreciendo actualizaciones a medida que se obtenga más información acerca de la seguridad de la vacuna de Pfizer-BioNTech en condiciones reales.
Estos efectos secundarios suelen aparecer al cabo de uno o dos días después de vacunarse. Pueden parecerse a los síntomas de la influenza e incluso podrían afectar su capacidad para realizar las actividades diarias, pero deberían desaparecer en unos días.