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La falta de operarios en el cementerio de Aranda de Duero, en la provincia de Burgos, parece ser una preocupación persistente que está afectando tanto a los trabajadores como a la gestión del lugar. La situación se agrava con la partida temprana de uno de los nuevos empleados contratados para paliar la escasez de personal.
Actualmente, solo hay dos empleados activos, uno de ellos contratado desde la bolsa de empleo en octubre pasado y otro de los cuatro operarios de plantilla. Los otros tres están fuera debido a bajas médicas y excedencia, lo que deja una carga de trabajo insostenible para los que están en activo.
La concejala de Personal reconoce la gravedad del problema y lo describe como una prioridad para el Ayuntamiento. Sin embargo, señala que encontrar una solución no es fácil, ya que las personas registradas en la bolsa de empleo no muestran interés en trabajar en el cementerio.
La solución propuesta por el equipo de gobierno implica una modificación de la plantilla, similar a la que se está considerando para la contratación de trabajadores sociales en el Pleno de esa misma tarde. Esta medida, aunque necesaria, lleva su tiempo en implementarse. Sin embargo, se espera que al menos alivie la situación hasta que la modificación de la plantilla sea aprobada.
Con la nueva Relación de Puestos de Trabajo, el Ayuntamiento podrá iniciar procesos de contratación para cubrir las vacantes existentes en el Consistorio, lo que eventualmente debería resolver el problema de personal en el cementerio de Aranda de Duero. Sin embargo, se necesita un enfoque urgente y eficiente para garantizar el adecuado funcionamiento del servicio mientras se espera la aprobación de la modificación de la plantilla.
Fuente: VER