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Hollie James, la joven inglesa que desafía los tabúes de la industria funeraria
A los 24 años, Hollie James está rompiendo barreras en una industria tradicionalmente asociada con personas de mayor edad. Nacida en Radstock, cerca de Bath, Hollie se ha convertido en la directora de funerarias independiente más joven de Somerset, un logro que, según ella, genera sorpresa en quienes la conocen. 'Me dicen que no parezco una directora de funerarias', comenta con una sonrisa, aunque admite que es algo que siempre la ha motivado a seguir adelante.
Su historia tiene una raíz personal. A los 15 años, Hollie perdió a su madre, una experiencia que marcó su vida de manera profunda. 'Recuerdo que todo fue un poco borroso en el momento de organizar el funeral', explica. Esa vivencia le inspiró a adentrarse en el sector funerario, un trabajo en el que ahora siente que puede ofrecer algo único: acompañar a las personas en sus momentos de dolor y darles el apoyo que ella misma no tuvo en su momento.
Todo comenzó a los 18 años, cuando decidió empezar su carrera en el sector con un aprendizaje en el crematorio local de Bath. No fue el camino convencional para muchos jóvenes, ya que, al no obtener las calificaciones que esperaba en sus exámenes, fue sus abuelos quienes la animaron a seguir esta vía. A pesar de los nervios iniciales y la responsabilidad que conlleva el trabajo, Hollie nunca se rindió. 'Al principio me ponía muy nerviosa, incluso tenía palpitaciones', recuerda. 'Es que me importa lo que hago, no hay margen de error. Es algo que tiene que ser perfecto'. Con el tiempo, esa ansiedad desapareció y ahora gestionar funerales se ha convertido en algo natural para ella.
Tras su aprendizaje, Hollie empezó a hacer contactos con otros directores de funerarias de la región, lo que le permitió emprender su propio negocio. 'Fue aterrador al principio', admite. 'Pasar de trabajar en una empresa consolidada a tener mi propia funeraria fue un gran desafío. Pero hasta ahora ha ido muy bien'. Su empresa está centrada en ofrecer un trato cercano y humano, algo que Hollie considera esencial: 'Siempre decimos que, metafóricamente, guiamos a las personas de la mano a través de este viaje'.
Además de ofrecer un servicio personalizado, Hollie se ha propuesto cambiar las percepciones sociales en torno a la muerte y los funerales. 'Hay mucho tabú sobre la muerte, y es algo que necesitamos empezar a hablar más abiertamente. Me siento orgullosa de que cada vez más jóvenes se animen a entrar en este sector', dice con esperanza.
A través de su trabajo, Hollie está demostrando que no hay edad para marcar la diferencia y, lo más importante, para brindar el consuelo y el apoyo que las personas necesitan en sus momentos más difíciles.
Fuente: VER